En mi familia siempre hemos tenido perros, desde pequeño aprendí a quererlos y admirarlos por su gran entrega y fidelidad hacia los miembros de su familia, siempre me considere un dueño responsable de mis perros, los alimenté, los entrené y los eduqué pero fue hasta que llego Zeus un perro bóxer que me regalo mi hijo que me di cuenta que todo lo estaba haciendo mal.

Al llegar Zeus a la casa, familia, amigos y vecinos me dijeron que debería tener cuidado ya que estos perros eran agresivos y que debería entrenarlos antes de que se volviera dominante, investigue en internet y la historia del bóxer indicaba todo lo contrario pero igual dije "por si las dudas", así que recurrí a un entrenador, lo deje un par de semanas en los cuales iba algunos días por indicación del entrenador para "pasarme el mando" ya sabes el perro con una cadena al cuello y yo estar estirando diciendo NO a cada paso que daba, al cabo de un par de semanas Zeus regreso a la casa, sabía que tenía que pasear con él para que no se olvidara de su entrenamiento así que cada tarde salía con él y la cadena al cuello, aun siendo cachorro y con el ímpetu que tienen todos los cachorros todo el paseo me la pasaba jalando obligándolo a estar a mi lado, había algo en la mirada de Zeus que me decía que algo estaba mal, pero no lograba descifrar, así que me puse nuevamente a investigar y solamente encontré refuerzos del entrenamiento a base de castigo como el que me habían enseñado, así continue por dos años hasta que llego Kiara.

Kiara es una perrita Husky que adopte por medio de una gran amiga, al llegar a casa aplique todo mi conocimiento "no debe entrar a la casa antes que tu" "desde el principio debes mostrar quien manda" "primero debo comer yo y después ellos" y otras barbaridades mas, a Kiara también la lleve con el entrenador y la deje un par de semanas pero esta vez el entrenador me dijo "Kiara no es muy inteligente así que va a ser difícil hacer que entienda los comandos" cuando fui a que me "pasara el mando" Kiara con el collar de castigo puesto se tiraba al piso de lado levantando una pata, apartaba la mirada de mi y se lamia mucho el hocico, el entrenador me decía que por eso era difícil entrenarla se tiraba cada vez y que tenia que estirar con mas fuerza el collar de castigo para obligarla a pararse y así lo hice.

Durante las siguientes semanas de entrenamiento y "paso de mando" Kiara en vez de tirarse ya se sentaba, pero siempre apartaba la mirada y con el hocico cerrado solo sacaba la lengua para lamerse, el entrenamiento termino y Kiara regreso a casa.

Ahora el sentimiento de que algo no estaba bien se había duplicado y cada vez que sacaba la correa y la cadena Kiara se alejaba de mí con una mirada que me demostraba temor, eso por ninguna motivo podría estar bien.

Seguí investigando y encontré un diplomado donde estudie durante mas de año y medio el lenguaje canino y un método para enseñar a mis perros buenos comportamientos, trucos y muchas cosas padres sin necesidad de maltrato de ninguna forma y sin collar de castigo.

Ahora Kiara y Zeus han cambiado mucho, son más alegres, juegan y acatan las reglas de la casa, al sacar la correa solo es alegría en su mirada, sin maltratos de ningún tipo, el lazo entre mis perros y yo se a fortalecido, los disfruto más y ellos a mí, esta perrita me motivo a buscar otras formas de relacionarme con ellos, formas sin castigo, sin dolor, sin maltrato, y esta casa ahora es La casa de Kiara.

Se que muchos amamos a nuestros perros y tenemos esa idea del perro dominante y el entrenamiento por medio del castigo queremos mostrar que hay otras formas mas divertidas con mejores resultados para interactuar con ellos, por eso creamos esta tienda buscando que a través de nuestros productos, videos, blogs y ligas a paginas interesantes ayudemos a mejorar la convivencia, la interacción y fortalecer ese lazo especial con ellos.

Estamos en contra del maltrato animal por esto en nuestra tienda no tendremos ningún producto que cause daño a nuestros perros o a nuestra relación con ellos como collares de castigo, de choque eléctrico o cualquier otro que ocasione dolor o maltrato.

! Esperamos que disfrutes de La casa de Kiara ¡